No sé usted, pero yo tiendo a ser una persona que vive en el futuro. Me cuesta disfrutar el presente, y me olvido rápido del pasado, ya que paso la mayor parte de mi tiempo pensando en los próximos proyectos, los pendientes, las metas y los sueños por cumplir.
Cuando vi la entrevista de Craig Groeschel con John Maxwell, hubo una frase que me retó y me llamó la atención. John dice así, “You’ll never change your life until you change what you do daily. The secret of your success is determined by your daily agenda.” En español se podría decir que “Nunca cambiarás tu vida hasta que cambies lo que haces a diario. El secreto de tu éxito se determina por tu agenda diaria.”
¿Cuántas veces no soñamos con distintas cosas que nos gustaría hacer, lograr o alcanzar en la vida? Sin embargo, en muchos de los casos lo dejamos pendiente para algún día en el futuro. Anthony O’Neal dice que nunca verás los resultados – en el trabajo, en el gimnasio, en tus relaciones, con tu dinero o en tu relación con Dios – a menos que te presentes cada día a meter el trabajo duro.
En lo personal siempre me ha gustado el deporte – la actividad y condición física. Aparte de tener beneficios para la salud física y mental, siento que también me ha enseñado mucho sobre la vida en general. En el ámbito deportivo, es fácil establecer metas y soñar con futuros logros: llegar a correr 10 kilómetros, llegar a levantar 400 libras en el press de banca, terminar un juego de golf por debajo del número de par. Pero la realidad es que dichas metas no se alcanzan de un día para otro. Tampoco se logran mágicamente algún día en el futuro. Implica empezar con lo que tenemos – corriendo 500 metros cada día, levantando 60 libras dos veces a la semana, practicando nuestro swing de golf semanalmente – para luego ir aumentando gradualmente. Implica vivir con el dolor muscular que viene asociado con el crecimiento y desarrollo. Sólo así avanzamos, y sólo así logramos nuestras metas.
Este mismo principio aplica tanto en la vida, como en nuestro liderazgo. Si queremos alcanzar nuestras metas, implica empezar desde hoy con lo que tenemos, e ir avanzando. Implica pasar por los dolores de crecimiento, los fracasos, las decepciones y los retos. Dar todo lo que tenemos, descansar y regresar el siguiente día para volver a dar todo.
Nunca cambiarás tu vida hasta que cambies lo que haces a diario. El secreto de tu éxito se determina por tu agenda diaria. Así que te pregunto:
¿Cuáles son tus metas? ¿Qué te gustaría lograr en tu vida espiritual, personal, familiar y laboral? ¿Qué metas tienes para tu empresa u organización?
¿Cuáles son los cambios que necesitas hacer en tu agenda o rutina diaria, para que tu vida se vaya encaminando en la dirección deseada?
Esta serie está basada en la edición 85 del Craig Groeschel Leadership Podcast. Foto: Kate Trifo.
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